Ana Rodríguez del Club Malvinas Argentinas de Parque Chacabuco comenta la actualidad de «Defendamos los […]
Publicado el 13 octubre, 2019 por Nicolás Rosales
Ana Rodríguez del Club Malvinas Argentinas de Parque Chacabuco comenta la actualidad de «Defendamos los Clubes» y el trabajo que hacen para avanzar en los temas de género dentro de estas instituciones.
¿Cómo surgió defendamos los clubes?
A partir del 2016, en particular desde que asumió Mauricio Macri, los clubes entramos en un estado de crisis complejo y una de las causas fueron los tarifazos que vivimos. Los clubes que pagamos facturas moderadas, esas facturas nos permitían que nuestros clubes crezcan, que tengan mejores instalaciones, mejores actividades para nuestrxs socixs. Los ingresos son para pagar servicios públicos, eso lo queremos dejar en claro. Estamos pagando unas tarifas muy difíciles y a su vez, desde esta problemática, que no es de un solo club, sino que es de muchos clubes. Nos juntamos y empezamos a trabajar en este tema en particular, pero esto abrió un montón de abanicos, que entendemos que la lucha colectiva es la que vale.
Además lo que es un club de barrio a nivel contención…
Sí, los clubes de barrio son instituciones únicas en América Latina y son muy importantes en nuestro país. Es una institución que cumple un rol y una función social importantísima, que contiene a un montón de pibes, que van, hacen sus actividades y eso permite que estén adentro de los clubes y no estén en la calle, con todo lo que eso significa. Eso es fundamental y por eso es que nosotros peleamos, para que ninguno cierre, sabiendo la historia de lo que sufrieron los clubes en los años 90. Esto nos puede traer a la memoria lo de Avellaneda y demás instituciones, que tuvieron que cerrar. Pero bueno, creo que es fundamental entender y que es por algo que nosotros luchamos, es por nuestro rol social, que muchas veces sufrimos el rol del estado en lo que incumple.
¿Vos que rol cumplís en el club?
Estoy en club hace bastante tiempo. Empecé participando como una socia, porque te gusta el lugar y te vas sintiendo cada vez más a gusto. Porque uno también lo va pensando como un acto de militancia en un club de barrio. Hoy estoy trabajado en la presidencia, con todo lo que eso conlleva, desde lo administrativo, las actividades. Igualmente es una tarea que hacemos en colectivo con la Comisión Directiva. La cuestión administrativa es lo que más trabajo porque es en lo que más me siento cómoda y es lo que se relaciona. Estudio la carrera de Ciencias Políticas, con orientación en Políticas Públicas, entonces trabajamos un poco eso, cómo mejorar cada día nuestro club para lxs socixs y para lxs vecinxs que se acerquen.
En base al empoderamiento que vienen teniendo las mujeres y entendiendo que dentro de los clubes hay cierto machismo producto al sistema patriarcal ¿Cómo se vive en un club de barrio?
Obviamente el machismo y el patriarcado están muy instaurados en la sociedad. Voy a hablar, en particular, con mis compañeras desde Defendamos los Clubes. Estoy en un club de barrio, en donde soy parte de la comisión y siempre mis compañeros fueron muy generosos. Pero eso no sucede en la mayoría, no es algo que esté establecido en otros clubes, todo lo contrario. En muchas comisiones no hay mujeres. El rol de la mujer es mas de acompañamiento, mas social, el de la “mamá” que participa en la vida del club. Por eso, entendimos que en el momento que estamos viviendo con las otras compañeras de distintos clubes con los que venimos trabajando (de Villa Miraflores, de Flores Sur, de Federación Flores, de Sportivo Devoto) entendimos que lo urgente era lo de las tarifas, pero también era importante darle una mirada y pensar los clubes de barrio con perspectiva de género y desde el feminismo. Entonces empezamos a juntarnos distintas dirigentas. Próximamente va a salir una campaña para visibilizar el rol de la mujer dentro de los clubes y estamos trabajando con la lógica de paridad en las comisiones directivas, en la lógica del libre acceso al deporte, la explosión de la profesionalización del fútbol femenino que nos llena de orgullo. Pero también es necesario que en las comisiones directivas haya mujeres, porque también trabajar esa perspectiva de género, nos permite seguir avanzando también en el acceso al deporte. Después queremos ir por más, no solo el libre acceso al deporte o la paridad, también queremos más entrenadoras mujeres, queremos más árbitras mujeres. También creo que el feminismo y la perspectiva de género puede aportar un montón a estas instituciones tan únicas como son los clubes de barrio. Pensar en un nuevo modelo institucional, creo que está buenísimo, porque vamos a seguir creciendo. Nosotras creemos que el feminismo viene a aportar a este rol social que cumplen los clubes de barrio.
¿Vos crees que cuesta mucho llegarle a lxs vecinxs con todo este cambio de perspectiva sobre todo desde un club?
Por eso es importante que haya compañeras en las comisiones directivas, para esta cuestión. Para desde tener en cuenta a cómo nos nombran cuando estamos haciendo una actividad deportiva, de tener en cuenta las decisiones, los horarios y distintas cuestiones que van haciendo la vida cotidiana. Lo que nosotras desde dirigentas, estamos pensando esta lógica de que no sólo sea la Comisión de Mujer dentro del club, sino que sea a lo largo y a lo ancho de nuestras instituciones, que se trabaje con perspectiva de género. También esto de “no llores como una nenita”, o cuando en un equipo femenino de lo que sea se les dice “pongan huevo” cuando salen a la cancha, estas lógicas que parecen muy cotidianas y que están muy arraigadas, son las que de a poquito, hay que ir cambiándolas. Creo que el feminismo y las compañeras que están, porque los clubes de barrio están llenos de mujeres, lleno de mamás que se convierten en dirigentas, entonces eso es lo que tenemos que ir a buscar.
Para estos encuentros que están haciendo de dirigentas de clubes… ¿Cómo las contactan?
Nuestras redes son: @defendamoslosclubes. Cualquier cosa nos pueden escribir ahí y siempre publicamos los días que nos juntamos, todos los encuentros de dirigentas que cada vez somos más y que es de a poquito, pero sabemos que en todos los clubes están las compañeras trabajando muchísimos por nuestros clubes.
Tocaste un tema sobre Sportivo Devoto… ¿Paso algo particular?
Sí. La verdad es que la pesadilla de todos los clubes de barrio hoy, son las tarifas de los servicios públicos. El club Sportivo Devoto, tiene una deuda de $1.000.000 de agua. Es impagable y es un club que no tiene pileta, para que entiendan un poco (risas). Esta deuda se fue acrecentando, porque pensemos que nosotros las tarifas, hace tres años y medio casi cuatro, las pagábamos cada dos meses. Hoy, desde el 2016, pagamos mes a mes. El club que menos paga, paga $20.000. Sportivo Devoto tenía estas deudas y esta semana, como ellos no tienen cuenta que pueda ser embargada, quieren embargarle el terreno y el club. Que es algo que desde Defendamos los Clubes venimos trabajando, que no se pueden embargar los terrenos de los clubes de barrio. El avance es terrible, que constantemente quieren ir por nuestras instituciones y en particular, esta semana nos tomó muy de sorpresa esta cuestión de AYSA, que aclaro que es un servicio público y que es una empresa del Estado Nacional. Nosotros cumplimos un rol social, que el Estado muchas veces no lo cumple y una empresa estatal quiere embargar unos terrenos por una deuda que es impagable y no recuerdo bien ahora, pero las opciones de pago, también eran impagables (algo de $700.000), que es irrisorio para los ingresos que hoy tiene un club de barrio.
Es una locura que falte un club de barrio por la contención que tienen. Son casi como la segunda escuela y el trabajo social que tienen, desde que los pibes aprendan ese compañerismo, valores, determinadas actividades. No solo el eje de lo deportivo, sino el eje de lo social también…
Si, tal cual. Me parece que es fundamental este rol que tienen y que uno en los clubes de barrio aprende un montón de valores. El valor de trabajar en equipo, el de la solidaridad, el de conocer a tus amigos que te van a acompañar. Los clubes de barrio tienen una historia de vecinos, de familia y esto siempre lo charlamos desde “Defendamos” ¿Cuántas familias se formaron en los clubes? Pero siempre el valor de la solidaridad, lo aprendes en el club de barrio, entre otras instituciones.
Con esto que hablamos de los clubes como un lugar donde se aprenden valores y se construye comunidad, hay un gobierno que va en contra de todo eso. Es inadmisible que se tengan que cerrar clubes por estas políticas de ajustes constantes…
Sí, es clave esto. No es que los clubes no queremos pagar, es que no los podemos pagar porque es insostenible lo que tenemos que pagar de agua o de luz y eso acota a una crisis económica que estamos viviendo y que ningún club quiere que sus socixs, los pibes y las pibas que hacen alguna actividad deportiva o cultural dejen de participar. Entonces es muy complejo, por eso también es que nos juntamos y trabajamos para adelante. Esto me da el pie para decir que nosotros desde Defendamos los Clubes, queremos la tarifa social y que acá en la Ciudad de Buenos Aires, en particular, es voluntad política de Horacio Rodríguez Larreta. Porque desde que la Ciudad entró en el «Consenso Fiscal», la decisión depende del Gobierno de la Ciudad. Por eso es que nosotros peleamos, también hicimos distintas actividades. Hay un proyecto de ley en la Legislatura, pero esa voluntad política hoy, no la tiene Larreta.
¿Cómo se sustenta un club de barrio? Porque muchas veces no alcanza con la cantidad de socios y hay clubes que se sustentan de otra manera.
La cuota social hoy, en los clubes de barrio, está entre los $50 o $100. La verdad es que muchos socixs dejaron de pagar, porque uno cuando está viviendo momentos de crisis, va ajustando por los lugares, dejas de comprar, dejas de salir, dejar de ir al club. Nosotros desde las comisiones directivas, no queremos que se vacíen los clubes, queremos que lxs pibes estén adentro y no en la calle. Entonces los clubes se mantienen como pueden, alquilan sus instalaciones, hacen peñas, ferias americanas, donaciones, muchas veces la misma gente del club va pagando esto, va poniendo acá, va sacando allá. Se va sobreviviendo y hay algunos clubes que tienen la suerte de tener todos los papeles en regla, que esa es otra problemática que tienen los clubes de barrio. Hay algunos programas del Gobierno de la Ciudad, desde la Subsecretaría de Deportes, que también a veces ellos ayudan, pero no son suficientes. Los clubes se van manteniendo con la voluntad de sus comisiones, de sus socixs y de sus vecinxs.
Ustedes desde Defendamos los Clubes.. ¿Cómo contrarrestan todo esto? ¿Qué actividades hacen?
Hicimos un montón de cosas (risas). Cuando empezamos a trabajar fuimos a Edesur para ver la problemática de la luz que muchos clubes no la pueden pagar o se le sumaban muchos planes de pago, se les cortaba el servicio y eso significaba que los clubes quedaban sin actividades. Entonces nosotros hicimos distintas intervenciones en Edesur. Después fuimos a la Secretaría de Energía, distintos lugares para que nos conozcan y visibilizar nuestras problemáticas. Obviamente que las redes sociales, hemos ido a distintos programas de televisión y demás. Pero como principio es visibilizar la problemática que nosotros estamos viviendo y que no es solo mi club ni el de mis compañeras, son todos los clubes que hoy están pasando esta problemática.
Pensando de acá en adelante y a semanas de las elecciones… ¿Tienen alguna actividad programada?
Nosotros durante los fines de semana por la mañana, estamos haciendo jornadas de salud, estamos trabajando con la cuestión de los aptos físicos, para poder cuidar también la salud de la vida deportiva de lxs distintos chicxs y adultxs que practican deportes.
Gentileza del programa radial Voces del Sur. Sábados a las 14hs. en FM Bajo Flores 88.1 MHz.
Esta obra está bajo una
Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional (CC BY 4.0).Por favor no corte ni pegue nuestros contenidos, tiene la posibilidad de redistribuirlos usando nuestras herramientas.
Para enviar su comentario debe estar registrado y haber confirmado
que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones.