En el bar la vecindad se anima

Los espacios culturales van abriendo y en “El Toro” ya funcionan talleres y hay actividades puntuales como la de este sábado a la tarde, donde se desarrollará la segunda jornada de narraciones de cuentos.

En el bar-biblioteca “El Toro” de Zuviría 999 esquina Cachimayo, se retomó la actividad y de aquí hasta fin de año estarán llevando a cabo varias propuestas con interacción vecinal, tanto en el salón como en las veredas.

Lo distinto de este lugar del barrio Parque Chacabuco es que además del tradicional servicio en las mesas, las mismas pueden ser utilizadas para trabajar, estudiar, charlar, leer, sin ninguna obligación de consumo. “Es una forma de devolverle al barrio el apoyo que siempre nos ha dado, en todo sentido”, afirmó a LC7, Susana Rodríguez, responsable histórica del espacio.

En la vereda siempre tienen dos mesas con varias cajas de madera, que albergan libros de regalo para quien pase caminando y guste llevarse uno. Son textos escolares, apuntes de universidad, cuentos, novelas, poesía, con un cartel que dice: “Si te gusta alguno llevalo y si te sobra alguno traelo”.

“Se va generando un clima de intercambio, que es incluso saludable”, dice Susana y agrega que muchos libros son producto de donaciones que hacen los vecinos y vecinas del barrio o de cartoneros amigos de la biblioteca que a veces también traen libros para dejar en las cajitas de regalo.

De aquí hasta fin de año programaron una oferta de talleres muy diversa, en algunos casos son a la gorra o tienen un pago mínimo. Tienen un taller de ajedrez para niños y para adultos de los miércoles, le agregaron un taller literario y otro de teatro, pero éste último todavía está en formación.

A ellos se le suman actividades especiales y jornadas como la de este sábado 23 de octubre a las seis de la tarde, donde se harán narraciones de cuentos y se plumereará el salón para recibir al maestro Gerardo Cirianni, con sus cuentos de aquí y allá….

“Nos gusta que el bar sea un lugar de encuentro, de los vecinos, a través de una actividad concreta, que no siempre estaría al alcance de todos en lugares más formales. El bar de barrio se anima, el bar de la esquina es un espacio amigable donde uno puede escribir un cuento, una poesía, hacer improvisaciones teatrales, en un clima distendido y suelto. Queremos que se animen a entrar, a preguntar y se anoten. Es completamente libre y nadie se quedará afuera por motivo exclusivamente de dinero”, completó Rodríguez ante la consulta de LC7.

También de acá a fin de año harán alguna charla debate -los temas de ecología social y ambientalismo son un clásico-, pero al decir de Susana “todavía estamos tanteando a ver cómo nos va con los barbijos, alcoholes y todas estas cosas”.