La esperanza no se pierde

En el marco de los aniversarios de los barrios de Flores y Parque Chacabuco que integran la Comuna N° 7 se llevó a cabo un acto homenaje en el ex Cine Teatro Pueyrredón. Renovaron esfuerzos para su recuperación.

Sobre la avenida Rivadavia casi Rivera Indarte y a pasos de la Plaza Flores funcionó el Cine Teatro Pueyrredón. Un lugar emblemático dentro del circuito cultural del barrio y que hacía a la identidad de una oferta más que importante de cines alguna décadas atrás. Hoy, lastimosamente este espacio se encuentra totalmente abandonado. Tan solo se divisa algo de lo que fue en su fachada original.

El pasado 13 de mayo se volvió a colocar una placa que anuncia su valor histórico y cultural declarado por la legislatura porteña hace 10 años. La misma y con el correr de los años, se había deteriorado.

Tras una iniciativa de la Junta Comunal N° 7 se reunieron allí personas vinculadas a las juntas históricas de Flores y Parque Chacabuco, integrantes del Paseo de Los Artesanos, el comunero de Cambiemos Néstor Iglesias, el presidente comunal Federico Bouzas, miembros del Consejo Consultivo Comunal N° 7, y una veintena de vecinos y vecinas. Tras decir algunas palabras en recuerdo de lo que fue el cine teatro y de lo que podría volver a ser, se descubrió la nueva placa recibiendo calurosos aplausos.

Este medio vecinal conversó Susana Campari, ex asesora e impulsora de un proyecto para recuperar el cine teatro junto a Diana Maffía, diputada de mandato cumplido y actual Directora del Observatorio de Género en la Justicia del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires, quien expresó y recordó: “Este era, para quienes somos vecinos de Flores, un lugar realmente simbólico y con mucha historia. Fue creado por Clemente Lococo, empresario del cine y el teatro de aquellos tiempos, y acá venían grandes personajes de la cultura, el cine, y el teatro. Era un lugar de encuentro. En su momento se presentó un proyecto en la legislatura que habría que reflotarlo”.

Por otro lado aclaró: “Todo estos llegó hasta la instancia del tribunal de tasación para ponerle un valor a la propiedad y a partir de allí nunca se encontraron las llaves. El lugar tiene dueños, pero no sabemos en qué situación está el inmueble. Con el proyecto al menos se evitó la venta o que lo tiren abajo”.

Por último, Campari dijo con un tono esperanzador que “con esfuerzo público y privado esto se podría renovar y recuperar, tenemos que seguir luchando”.

Fotografía: Nicolás Rosales.-