“Es muy complejo sostener un trayecto pedagógico hoy”

En la zona de Barros Pazos y Agustín de Vedia está la Escuela de Enseñanza Media N° 3 D.E. 19 «Profesor Carlos Geniso». Una de sus docentes, María Eugenia Losa, repasó con LC7 el panorama educativo porteño actual: funcionamiento de las burbujas, falta de conectividad y plan de vacunación para los docentes de media.

La complejidad de sostener las burbujas

María Eugenia Losa, profesora del área de comunicación e integrante del equipo ESI (Educación Sexual Integral) comenzó explicando el funcionamiento de las burbujas escolares con las particularidades que tiene su institución: “Las burbujas se venían organizando desde que empezamos el ciclo escolar en el mes de febrero. Dependiendo de la cantidad de estudiantes veníamos bastante bien, ya que es una escuela que tiene los tres turnos con más de 500 estudiantes, lo cual implica una gran organización. Pero uno de los principales inconvenientes que continuamos acarreando es que la escuela no está habilitada adecuadamente desde los espacios porque no cumplimos con los requerimientos de ventilación acordes a las medidas sanitarias del covid-19. Todavía continúan con las reformas y esto conllevó un problema que fue que no había el suficiente espacio físico para llevar a adelante todas las burbujas. Por lo tanto, los protocolos estaban, pero no se adecuaban a la realidad edilicia. Nos adecuamos para funcionar en el comedor, en el patio, o en el gimnasio, espacios de por sí incómodos, porque no son aulas”.

Falta de conectividad

La docente también hizo referencia la falta de conectividad y las adaptaciones pedagógicas acogidas en los tiempos que corren: “Se valoran mucho las ganas que tienen las y los estudiantes de venir, de estudiar y estar en la escuela. Lo que pasa en el barrio es que, los y las pibas están bien en la escuela porque no cuentan en sus casas con lugares cómodos, o directamente no cuentan con los dispositivos. Suele pasar que una familia haya un solo celular y que no siempre tienen carga con datos. Y en este aspecto desde la virtualidad, en el caso que hiciéramos clases bajo esta modalidad resulta muy difícil poder combinar los tiempos. Claramente el alumnado necesita computadoras para llevar adelante una virtualidad acorde al contexto. No es lo mismo resolver un trabajo desde un celular y con muy poca conexión. Por este asunto se propusieron guardias pedagógicas para que los alumnos que no tienen conexión puedan resolver las tareas en papel. Hoy en día, la comunicación virtual que mejor nos funciona es el Whatsapp, porque se nos hacía muy difícil el Classroom o Zoom para dar clases o explicar trabajos. Este año estamos probando una plataforma online que habilitó el gobierno que no consume datos, pero recién estamos arrancando con eso. Además, como la realidad cambia semana a semana, se creó un espacio de tutoría para que los alumnos vengan una vez por semana a la escuela. El resto es virtual”.

Contagios y vacunación

“En este último tiempo hubo tres docentes contagiados. Este fue justo dos días anteriores al DNU. Hubo algunos alumnos o familiares cercanos también, que se tuvieron que aislar, en los centros de aislamiento que había en el Bajo Flores. Desde la escuela se armó un comité de seguimiento para ver de qué manera se podía acompañar y ayudar a la gente. También los que viene haciendo la escuela es articular con otros espacios, como una red con los CESAC, y organizaciones sociales del barrio. En cuanto a la vacunación en nivel medio no nos han vacunado aún. Entiendo que la vacunación docente en la ciudad viene muy lenta”, continuó describiendo la profesora y opinó que “la presencialidad es muy difícil de reemplazar y por la realidad de esta parte de la ciudad por la falta de dispositivos y conectividad, es muy complejo sostener un trayecto pedagógico. Esto se contrapone con prioritario en este momento que es el cuidado de la salud. El camino sería ir hacia un corte de circulación de personas más drástico”.