“Se trata de ser solidarios con las familias que lo necesiten”

La Iglesia Metodista y la Iglesia Evangélica Valdense del barrio de Flores están trabajando juntas para entregar bolsones de alimentos cada quince días. En esta nota te contamos sobre la iniciativa solidaria.

Durante la cuarentena  se multiplicaron las acciones solidarias en la comuna para lograr contener un poco la crisis económica y social producida por la pandemia de la COVID-19. En este caso, cada 15 días, la Iglesia Metodista (Yerbal 2451) y la Iglesia Evangélica Valdense (Av. Juan Bautista Alberdi 2240) de Flores trabajan juntas con el fin de dar su aporte a la comunidad y entregar bolsones de alimentos a las familias que lo necesiten.

“Con el trabajo de voluntarios y voluntarias se están entregando los bolsones de alimentos”, cuenta a este medio digital Daniel Favaro, pastor de la Iglesia Metodista. Son más de 40 familias las que reciben estas donaciones. “Desde hace muchos años que los sábados tenemos una actividad para niños y sus mamás. Son quince o veinte familias que una vez por mes venían a la iglesia y se las ayudaba con alimentos. Ahora la situación cambió y muchas de esas familias el apoyo lo necesitan igual o más que antes”.

A su vez, Favaro explicó que “los bolsones los podemos hacer porque nuestra Iglesia Metodista tiene una interacción con las iglesias del resto del país y una organización nacional. Desde esa organización, se consiguieron fondos para darnos a las comunidades para poder comprar los bolsones con regularidad. Por otro lado, se hizo un acuerdo entre nuestra iglesia en el nivel nacional (la Iglesia Evangélica Metodista Argentina) con otra ONG que se llama Creas (Centro Regional Ecuménico de Asesoría y Servicios) con el que consiguieron fondos y se compran los bolsones”.

Al mismo tiempo, en el templo de Yerbal 2451 toman donaciones de ropa, alimentos o dinero para la compra de alimentos de los vecinos de la comuna. “Estamos frente al desafío de poder colaborar con las personas que están pasando por mayores necesidades, mayormente económicas”, señala el pastor quien agrega que “para las comunidades religiosas cristianas que entendemos que nuestra fe tiene que ver con un compromiso con la sociedad es todo un desafío poder mantener eso sin encontrarse. Se trata de ser solidarios con las familias que lo necesiten”.

Además, la Iglesia Metodista de Flores tiene un acuerdo con AMADH (Asociación de Mujeres por los Derechos Humanos) mediante el cual acompañan a mujeres y sus familias. De esta forma, tratan de acercarse e intervenir ante conflictos familiares y situaciones de violencia.

Por otro lado, Favaro dio su visión respecto al período que estamos viviendo y expresó que “uno ve dos situaciones: una, es el ritmo que nos marca el propio virus y el cuidado de la enfermedad y, la otra, es la necesidad de la sobrevida de la gente en nuestro contexto social y económico. Hay como una contradicción de situaciones. La situación económica demanda levantar la cuarentena pero el virus demanda hacerla cada vez más rígida. Son situaciones contradictorias que es muy difícil de balancear” y agregó que “no tengo una situación de enojo o de rechazo a la cuarentena pero entiendo la necesidad de otros de tener que salir a ganarse el peso”.

También, el pastor señaló que es interesante el mayor uso que se le está dando a la tecnología de la que ya se disponía y comentó cómo siguen trabajando como comunidad a nivel espiritual implementando diferentes estrategias como lecturas de textos bíblicos por WhatsApp o correo electrónico y el envío de cartas de estado de situación de cómo está la comunidad. Esto se suma al llamado telefónico tradicional para acompañar a muchas personas que puedan estar pasando la cuarentena en soledad. Todo esto se da en un contexto donde, como dice Favaro, “el desafío es cómo seguir siendo una comunidad de fe sin encontrarse”.