El juez Otheguy había declarado la ilegalidad y la Comisión de Monumentos se había pronunciado […]
Publicado el 14 junio, 2019 por Fernando Zuker
El juez Otheguy había declarado la ilegalidad y la Comisión de Monumentos se había pronunciado en contra, pero sólo con los votos del oficialismo porteño, el gobierno se salió con la suya y su iniciativa es ley.
Bajo el procedimiento de segunda lectura y realización de una audiencia pública, la legislatura porteña sancionó sólo con el apoyo del oficialismo la ley que revalida la instalación de las rejas en la emblemática Plaza de Mayo de nuestra ciudad.
«Se permite la instalación de un cerco de seguridad emplazado de modo transversal desde Av. Hipólito Yrigoyen hasta Av. Rivadavia, por detrás de la Pirámide de Mayo, a la altura del eje de las calles Defensa y Reconquista», dice la norma aprobada que se incorporará al Código Urbanístico como un nuevo inciso dentro de las Áreas de Protección Histórica.
Los vallados de seguridad aparecieron a fines de 2001 y comienzo de 2002, como contención metálica de la sede gubernamental durante las manifestaciones populares que derivaron en incidentes de gravedad institucional, como la salida anticipada del ex presidente Fernando De La Rúa en helicóptero desde la terraza de la Casa Rosada.
En los siguientes años las vallas se ampliaron, aferraron, soldaron y/o cementaron; incluso en 2013 se colocó una reja.
En el 2018, la Jefatura de Gobierno inauguró remodelaciones en la plaza, entre ellas la colocación de una reja permanente, de mejor calidad estructural y en armonía con el paisaje urbano, con portones para permitir o bloquear el ingreso a la mitad de la plaza más próxima a la Casa Rosada, ya fuere para peatones o para vehículos en tránsito por las calles Yrigoyen y Rivadavia.
El Observatorio del Derecho a la Ciudad había presentado una acción de amparo que logró declarar la ilegalidad de esta instalación el 28 de diciembre pasado, cuando el Juez Otheguy dio lugar a la petición. Entonces el gobierno porteño fue por la ley y consiguió el marco para defender su idea inicial con 33 votos afirmativos y 22 negativos.
En este sentido, el observatorio mencionado planteó que «este blanqueo» degradará nuestro patrimonio cultural y reiteró que la Comisión Nacional de Monumentos, Bienes y Lugares Históricos rechazó las rejas en la Plaza de Mayo ya que esta «división física permanente fragmenta la lectura la lectura integra de este espacio público» y destacó que la misma es un «lugar histórico nacional» desde 1942 .
Por su parte, la propuesta oficial sostenida desde la comisión legislativa de Planeamiento Urbano planteó que el cerco de seguridad tendrá por objeto «proteger, conservar y mantener el patrimonio y espacio público urbano, así como también garantizar las cuestiones relativas a la seguridad de los ciudadanos y de la Casa Rosada».
Desde el bloque oficial de Vamos Juntos, Hernán Reyes recordó que hace 17 años que la plaza está dividida por vallas y que incluso «estuvo los últimos 11 años con rejas fijas», comentó el carácter de «reversibilidad» de la estructura, para el caso de que más adelante se decida erradicar ese cerco, y reconoció que el principal motivo de la ley es «que no haya más dudas sobre la legitimidad de la obra», en alusión a las presentaciones judiciales.
Desde la oposición, Javier Andrade de Unidad Ciudad señaló que la Plaza «se modificó estructuralmente» en su totalidad sin considerar la opinión de la gente ni prestar atención a las recomendaciones de los organismos pertinentes.
Desde la izquierda, todos los legisladores afirmaron que se trata de una medida represiva antipopular para defender las políticas impuestas por el FMI. Hablaron al respecto Fernando Vilardo, Gabriel Solano, Myriam Bregman y Laura Marrone.
Fotografía: Tiempo Argentino.-
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