“La mayor ganancia que tengo es la de enseñar”

Diego Juárez cuenta la experiencia del “Buena Vida Boxing Bajo Flores”, un equipo de entrenamiento al aire libre que no para de crecer. Buscan montar un gimnasio en el barrio para recibir a pibes y pibas de la zona.

Practica boxeo desde los 14 años, es su pasión y es un “amante de esta disciplina, me encanta lo que transmite: valores de compañerismo y respeto”. Tuvo varias peleas de exhibición y se entrenó con el profesor Hugo Aquino en el Club Huracán. En ese entonces, además se encontraba trabajando y estudiando. Fue papá muy joven, a los 17. Desde allí se dedicó a su familia, relegando un tanto el deporte. Fue y vino en el boxeo. Ahora, con 26 años, se toma revancha con la pilcha de entrenador transmitiendo toda su experiencia y conocimientos. “Seguí entrenando, y tengo mi licencia de boxeador amateur, y también la de entrenador profesional, la cual me autoriza a dar clases también”, agregó Diego Juárez, que encabeza el proyecto deportivo “Buena Vida Boxing Bajo Flores” .

La Comuna 7: ¿Desde cuándo arrancó este proyecto para entrenar a pibas y pibes del barrio?

Diego Juárez: Arranqué este proyecto desde el año pasado. En diciembre empecé con 4 chicos, que era y son mis amigos. Ellos fueron los primeros que depositaron su confianza en mí. De a poco se fue sumando cada vez más gente, conocidos de conocidos y así. Mi idea desde un principio fue que quien tuviera las ganas de presentarse a entrenar para iniciar la práctica del boxeo pudiera hacerlo sin pagar una cuota o un monto fijo. Todo lo contrario, es a colaboración, con lo que cada uno puede. La mayor ganancia que tengo es la de enseñar. Como el grupo fue creciendo, antes las clases las daba al aire libre en Avenida Roca y Avenida Varela, estuve un mes ahí. Sin embargo me pareció mejor empezar a dar las clases en las cercanías del barrio donde vivo, el Ricciardelli, ex 1-11-14. Ahí me trasladé a la Avenida Perito Moreno, casi Cruz, afuera de lo que es San Lorenzo. Como la gente nos ve como entrenamos, chicos y chicas empezaron a consultar cómo eran las clases, como entrenábamos, si se cobraba, etc. Pero insisto, no tengo la intención de cobrar una tarifa estipulada o sacar una ganancia, lo hago porque me gusta. Para dar oportunidades a todos por igual, y para quien pueda, colabore. Quien me da una mano y me apoya desde el día cero, es mi sobrino Facundo. Con él pensamos un nombre para  el equipo, así se nos ocurrió el de “Buena Vida Boxing Bajo Flores”. Hoy, vienen más de 25 chicos y chicas a entrenarse, de 15 años en adelante. El entrenamiento es por turno, con los cuidados necesarios. Se entrena los días lunes, miércoles y viernes desde las 19. Hay un amigo que me da una mano para entrenar. Los grupos van cambiando, pero en promedio vienen 8 personas por turno.

LC7: ¿Cómo se las arreglan con los insumos básicos para entrenar?

DJ: Cuando empecé puse mis cinco pares de guantes. A través de Daniel Quiros y del Club Flores Sur recibí una ayuda muy grande, les gustó el proyecto. Ellos quisieron colaborar y me donaron 15 pares de guantes. También sumamos 2 bolsas, y otras cosas que fui comprando. Hicimos una rifa, también remeras para que los chicas y chicas que vengan a entrenar se puedan identificar.

LC7: ¿El boxeo está de moda?

DJ: Sí. Sobre todo veo a gente grande que se engancha con la disciplina, en gimnasio o grupos de entrenamiento. Más allá de la disciplina o el entrenamiento físico, el boxeo acarrea otras cosas interesantes y para mí únicas: despeje mental, compartir con grupos de personas. El boxeo argentino es reconocido a nivel mundial y hoy en día tenemos muchos referentes a través de los cuales los pibes y pibas se pueden identificar deportivamente.

LC7: ¿Cómo proyectas este camino?

DJ: Si bien hoy estamos entrenando en espacios abiertos, me gustaría algún día contar con un espacio físico. Una instalación para poder entrenar mejor. Tuvimos una experiencia a través de Ariel Palombi y el Club Flores Sur que nos cedieron su espacio para hacer una clínica de boxeo. Lo ideal sería que el espacio propio se pueda montar acá en el barrio. Es un sueño más que nada para los pibes y las pibas. Que tengan su gimnasio. Conozco la experiencia de Ulises Blanco, y me encanta. Es sorprendente la cantidad de chicos que quieren hacer boxeo, entendiendo el deporte como un lugar de contención. Para ver la vida desde otra manera. Gracias a mi familia, por ahora puede seguir bancando este proyecto de manera autogestiva.