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La lucha de los locales sanos contra los grandes mercados que venden multiprocesados ya está en curso diariamente. Habrá que ver quién logra imponerse.

Hace unos años abrieron las dietéticas, negocios en el cuál venden semillas, almendras, leche de coco, tomate secos, entre otros productos saludables. En un principio, la gente que estaba acostumbrada a comer no tan sano, no le prestaba atención, incluso a veces estos negocios o éstas comidas saludables, caso verduras han sido denostadas. Nieguen si alguna vez, en algún asado si una persona quería poner alguna verdura lo primero que se decía era: “Estás loco, como vas a poner eso al lado de estas mollejitas o de esta tapa de asado”. Esos comentarios se fueron disipando ya que la sociedad fue avanzando y cambió esa forma de pensar.

La comida saludable ya tiene su lugar, sus negocios, pero ahora convive con otro enemigo y ese es la inflación. Se le consultó a Laura, atiende en el Bodegón Natural, dietética que queda en la calle Picheuta al 1378, cómo viene con este tema, pero también el por qué empezaron con este comercio: “Yo soy celíaca, igual no tiene tanto que ver con mi celiaquía, yo siempre comí saludable y me pasaba que me gustaba, me interesaba. Es más por una cuestión de gustos míos y que me parecía que estaba bueno que la gente que consuma sepa que consume, entonces es como desde la nutrición está bueno para informar a la gente”.

La inflación golpea a todos, no sólo a la gente de a pie, sino también a negocios que no son tan enormes como las grandes cadenas de supermercados. Laura señaló que ha bajado un montón la venta, que los productos en este momento están muchísimo más caros; por ejemplo la leche de almendras, los frutos secos, entre otros. Indicó que en un momento se había equiparado el precio, que no era tanta la distancia económica. Pero ahora la diferencia es casi el doble, entonces la gente se restringió y el consumo bajó.

La idea de las dietéticas es combatir a las comidas ultraprocesadas, aquel que no conoce estas comidas pueden ser las gaseosas y aguas saborizadas, jugos de fruta endulzados, bebidas energizantes y deportivas, panes industriales, snacks, carnes procesadas como salchichas, entre otros. Estos son productos que no son sanos, pero que son consumidos por la facilidad que tienen, es decir, no conllevan tanto tiempo de preparación; caso salchichas o snacks que es solo abrir el paquete. En síntesis, son comidas rápidas y que te sacan del paso.

Sobre este tema, le consultamos a Laura su opinión sobre cuál es la “batalla” que se da entre las dietéticas y las comidas ultraprocesadas: “Es por salud, es decir, vos tenés opciones saludables que son ricas y está bueno ver si podes sustituir eso y más que nada en los más chicos. Comen un montón de comida chatarra porque uno tiende a comprarle la galletita, la patita de pollo, todo para facilitarle y hay opciones saludables que las podes hacer vos o comprar.  La idea es esa, que puedan comer más sano”.

La gran mayoría de las dietéticas están sufriendo el tema de la inflación, a todas les pega por igual. Se le consultó a Federico Stenberg, dueño de Dietética Pasto situada en Coronel Ramón Falcón 2391, cómo les pegó el aumento de precios: “El tema de la inflación influye, nosotros fraccionamos mercadería, cada vez las fraccionamos más. Era medio kilo, era de cuarto y ahora de 100 gramos y lo que era de 100 gramos era de 50. Un montón de gente hoy selecciona lo que está consumiendo, teniendo un súper en la esquina o comercio de barrio la gente termina eligiendo por ahí comer con lo que le alcanza”.

La idea de Stenberg de poner el negocio fue por una situación familiar y de empezar a mejorar el tema de la alimentación y aprender sobre lo que están consumiendo. Al igual que el anterior caso, coinciden en que la batalla es contra los alimentos procesados y las comidas sin agroquímicos. “Un punto es la Ley nueva de Hexágonos (Ley N° 27642 de Etiquetado Frontal en los productos), ayuda un poco, pero también no termina siendo clara. La idea inicialmente de las dietéticas es generar conciencia de lo que uno se alimenta y qué es lo que está metiendo en el cuerpo”.

Las dietéticas y la comida saludable es un hecho y cada vez crecen aún más, pero todavía compite con la comida chatarra por la facilidad de prepararse. La solución es que la sociedad haga el clic de que aunque comer sano lleve su tiempo de preparación se permita conocer ésta forma de alimentarse. Viene a traer luz en nuestros cuerpos y lo más importante que es la salud de las personas.