Dificultades en el IVA

Desde antes de la pandemia, la comunidad del Instituto Vocacional de Arte “Manuel José de Labardén” de Parque Chacabuco reclama mejoras edilicias y mantenimiento de los espacios. Desde la Unión de Trabajadores de la Educación comentaron sobre el estado de la situación de este espacio educativo.

“Seguimos sosteniendo el pedido de que haya un cuidado del edificio porque es muy antiguo y no tiene un mantenimiento adecuado. Se hacen pocos arreglos y no de lo estructural, que es lo fundamental”, expresaron delegados de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) respecto a la situación del Instituto Vocacional de Arte “Manuel José de Labardén” de Parque Chacabuco (IVA, Curapaligüe 1026).

También agregaron que “a veces aparecen filtraciones con las lluvias y hay que cerrar partes porque no se pueden usar. El mantenimiento en general es nulo”.

La situación precaria a nivel edilicio del IVA no es nueva y ya desde antes del comienzo de la pandemia, la comunidad educativa de la institución reclamó que se realizaran mejoras y se brindaran recursos para poder dar una mayor calidad de enseñanza.

En noviembre pasado, delegados gremiales, docentes y miembros de la comunidad educativa se acercaron al Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires (de quien depende la institución) para denunciar que el presupuesto destinado por el gobierno porteño no alcanza para cubrir las necesidades básicas para el funcionamiento de la institución.

“Todo es muy precario actualmente. Las cosas se arreglan a medias muchas veces, cuando el tema es más de fondo, es estructural”, explicaron desde UTE. También, señalaron que por la falta de mantenimiento “la forma de dar clases termina siendo precaria, se pasa frío, las instalaciones no son las adecuadas. Cuesta mucho dar clases así y todas estas dificultades hacen más pobre la propuesta” y remarcaron que “no hay respuesta del Gobierno de la Ciudad ante las necesidades que tenemos”.

Por otro lado, a fines de marzo de este año, estudiantes, docentes y delegados gremiales de la Escuela Metropolitana de Arte Dramático (EMAD), el Conservatorio Superior de Música Manuel de Falla, el Conservatorio Superior de Música Astor Piazzolla y el IVA se movilizaron hacia la Dirección General de Enseñanza Artística (DGEART) del gobierno porteño, en donde dejaron una carta con el fin de reclamar condiciones dignas para trabajar y estudiar.

“Estamos reclamando todo el tiempo. Éste no es sólo un reclamo del IVA, toda la educación está así, con cero mantenimiento. Entonces, no es algo que solamente nos afecta a nosotros”, consideraron desde el gremio docente y subrayaron que “al final todo termina siendo pagado por la cooperadora, que es sustentada por las mismas familias de los estudiantes. De ahí es que se hacen afinaciones de instrumentos, arreglos, se compran materiales para pintar y demás. Y sólo por eso no se suspenden clases”.

El IVA se creó en 1913 como un teatro infantil y con el paso del tiempo adquirió la que sería su marca distintiva: la enseñanza de las artes plásticas, musicales y teatrales enfocadas en la educación integral del ser humano y en el aprendizaje en el marco de la búsqueda de la libertad creativa.

Actualmente, cuenta con tres sedes (en los barrios de Parque Chacabuco, Constitución y Parque Avellaneda) que tienen salas de jardín de infantes y talleres con diferentes disciplinas artísticas para niños, niñas y adolescentes de 3 a 17 años.

Fotografía: Prensa UTE.-