El Club Social Colón tiene 80 años y agregó actividades para toda la comunidad. Rubén […]
Publicado el 3 agosto, 2019 por Juan Bertrán
El Club Social Colón tiene 80 años y agregó actividades para toda la comunidad. Rubén Torelli cuenta la historia de este club que reúne a las familias y en donde alguna vez actuó Sandro.
“El Club Colón tiene 80 años de vida. Siempre funcionó en esta sede desde marzo de 1939. Nosotros estamos en la Comisión Directiva desde hace un año y medio”, explica Rubén Torelli cuando nos sentamos a charlar en una de las mesas en la entrada del club. “El club estuvo un tiempo cerrado y después funcionó un tiempo como Centro de Jubilados. Nosotros cuando nos hicimos cargo de la Comisión Directiva le dimos otra impronta, lo hicimos más social, incluimos algunas actividades nuevas, lo que el barrio andaba necesitando”.
Sobre la calle Zañartú 817, se puede ver el nombre del club en letras grandes y al estilo del fileteado porteño, los colores de la bandera argentina recubren las paredes de la institución. Cuando se camina por dentro, uno siente los 80 años de historia en cada paso y el resurgir de un club que quiere crecer, aumentar sus actividades y abrir las puertas al barrio.
Hace algunos años “solamente funcionaba como Centro de Jubilados», afirma Torelli. «Tenían pedicuría, enfermería, entregaban el bolso que se les entrega a los jubilados por el PAMI, tenían otras actividades”, aclara el dirigente y remarca que de la nueva comisión “somos todos de Parque Chacabuco, vivimos por Santander, Saraza, Somellera, todos del barrio desde hace muchísimos años”.
Las baldosas a cuadros negros y claros decoran el salón, junto a sus paredes blancas, los profesores dan clase, mientras la charla sigue. Rubén cuenta del impacto del club en su vida: “Crecí en este club. Mis viejos venían a bailar al tango de jovencitos. Muchos amigos nuestros se conocieron acá. Hace muchos años el club tenía mucha actividad cuando eran los carnavales. Ha venido a cantar Sandro en sus épocas más jóvenes e históricamente nos referenciábamos en este club”.
El club cobra una cuota social muy baja con el fin de que toda la comunidad se pueda acercar y ser parte de la institución. Hay actividades para todas las edades e intereses: zumba, gimnasia funcional, gap (gimnasia para glúteos, abdominales y piernas), gimnasia para la tercera edad, apoyo escolar, idiomas inglés y francés, yoga, clases de gimnasia para más chicos, clases de teatro, tango.
“Lo que intentamos nosotros es llegar a los vecinos que ya no pueden ir a un club por la situación económica, está difícil pagar un gimnasio o mandar a sus hijos a hacer una actividad. Acá los acompañamos, les damos la merienda, después de la merienda hacemos un poco de gimnasia, los ayudamos con la tarea. Tratamos de que los chicos no estén en la calle y tengan qué hacer y en qué pensar”, relata Rubén sobre los objetivos del club, quien a su vez señala las dificultades de gestionar un club: “Es muy difícil pagar los servicios, la luz, el agua, el gas. Los profesores casi todos son compañeros nuestros del barrio. Pero a los vecinos les está costando cumplir con la cuota social”.
Asimismo, el club es parte de «Defendamos los Clubes», la iniciativa que nació en la Comuna 7 y que busca proteger a las instituciones deportivas contra los aumentos en las tarifas. “Voy a cada rato al baño a ver si no pierde alguna canilla, apago las luces. Cuando te vienen 3 mil o 4 mil pesos de cada servicio se hace muy difícil sostener el club. Y a los clubes de la zona que tienen canchas de fútbol o pileta de natación climatizada pagar esos servicios es casi impagable. Te vienen 50 mil 60 mil pesos. No sé cómo hacen para sostenerse con una cuota social”.
Las actividades del club se practican generalmente entre las 16 y las 21 aunque a veces se extienden: “Los jueves que hay tango se copan tanto que siguen hasta 21.30 o más”, ríe Rubén.
Con aproximadamente cien socios, “como proyecto principal buscamos tener más actividades sobre todo a la mañana que por ahora no tenemos porque como los profesores trabajan en sus actividades personales no les dan los horarios pero esa es la idea, tener más actividades y más horarios”.
El club invita a profesores que quieran sumar su actividad al club. A su vez, el club alquila el salón para fiestas infantiles o eventos por la tarde. “Nuestra idea no es hacer plata, nuestra idea es estar cerca de los vecinos para lo que necesiten, hemos decidido que a la tarde no hay ningún problema para las fiestas infantiles, armar un pelotero, traer inflables pero nada más que eso”.
Agenda: El domingo 18 de agosto se realizará el Festival del Día del Niño y habrá juegos y merienda, entre las 15 y las 18 horas.
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