El equipo del Laboratorio de Intervenciones Metropolitanas de la Universidad de Flores está realizando una […]
Publicado el 5 junio, 2021 por Juan Bertrán
El equipo del Laboratorio de Intervenciones Metropolitanas de la Universidad de Flores está realizando una investigación sobre la educación antes y durante la pandemia y la perspectiva a futuro mediante una encuesta online abierta a los vecinos y las vecinas de la Comuna Nº 7.
El Laboratorio de Intervenciones Metropolitanas (LABIM) de la Universidad de Flores (UFLO) continúa con sus investigaciones a pesar del contexto actual. Es que en este año están abordando la cuestión de la educación antes y durante la pandemia y la prospectiva a futuro. Para eso se encuentran realizando un cuestionario online para vecinos y vecinas para trabajar sobre este aspecto, que se suma a trabajos anteriores en transporte y salud sobre la comuna.
A partir de un equipo interdisciplinario, el LABIM avanza con su investigación en un contexto adverso para trabajar en territorio. Hablamos con el arquitecto Ricardo Turano, la socióloga Ana María Sáez, el ingeniero ambiental Mauricio Cogollo y el ingeniero ambiental David Emilio Restrepo para conocer con más detalle la investigación que vienen realizando sobre la Comuna Nº 7 y sus hallazgos.
“El LABIM es una pequeña estructura que tiene la universidad que trata temas de urbanismo”, explicó Turano al comienzo de la charla. A través de este espacio, en estos años avanzaron en investigaciones sobre tres aspectos de la comuna: transporte, salud y educación. En este momento, se encuentran trabajando sobre esta última temática.
Este proyecto comenzó antes de los problemas sanitarios, por lo que “con el tema de la pandemia tuvimos que hacer un reenfoque metodológico para seguir adelante. Esto tenía los talleres y la cuestión territorial como fundamental”. Es que cada temática trabajada requería de talleres participativos y el armado de mapas temáticos con vecinos y vecinas e instituciones de la comuna y recorridos en territorio, cuestiones que debieron suspenderse o reemplazarse por actividades online.
Más allá de las dificultades, cada temática de la investigación cuenta con un cuestionario, una entrevista a un especialista, una instancia participativa y un estudio bibliográfico. “Lo interesante es empezar a entender al barrio en función de lo que pasa”, remarcó el arquitecto y agregó: “Hicimos un reenfoque y lo que planteamos fueron averiguaciones bibliográficas, la elaboración de cuestionarios online como para poder tener la información de los vecinos sobre la dimensión que nos tocaba analizar”.
Por su parte, Sáez resaltó que Flores y Parque Chacabuco conforman “una comuna sumamente estratificada” y que “es sumamente diversa y distinta. Tan diversa y distinta que hay cosas que no se pueden mezclar. No se puede pensar para la Comuna 7 generar un solo espacio social porque hay gente de distintos niveles, de distintas estratificaciones y hasta de distintas culturas”, por lo que la investigación que llevan a cabo plantea recuperar “qué piensa la gente que vive en la comuna. Empezamos a plantearnos todo desde la percepción de los vecinos sobre su propia comuna”.
“Nos estamos metiendo en el tema educación y para eso seguimos el mismo encuadre que hicimos en 2020”, expresó la socióloga, quien agregó que “se han hecho reuniones con especialistas e hicimos dos cuestionarios, uno abierto hacia la comuna sobre qué piensa con el impacto de la covid y otro que es interno hacia la comunidad UFLO”.
“El inicio de la pandemia puso en cuestionamiento muchas de las cuestiones que se venían viendo en términos urbanísticos. Desde hace varios años, desde el urbanismo se ha hecho una defensa férrea de las ciudades compactas y complejas”, destacó Restrepo y señaló que “la pandemia pone en cuestión eso que dice que una mejor ciudad es aquella donde la gente usa el transporte público y la gente tiene mayor roce social producto del encuentro en áreas urbanas, con una densidad relativamente alta”.
Siguiendo con este razonamiento, el académico describió que “Flores era un barrio con una densidad relativamente alta, con una alta mezcla de usos del suelo y de personas de distintas condición socioeconómica que se supone que es algo favorable en términos de una ciudad más eficiente en términos energéticos, más inclusiva, más compacta y más compleja” pero, a su vez consideró que el problema de Flores “no es un problema de alta densidad que nos haga más vulnerables a esta situación, sino que hay que empezar a mirar en esa heterogeneidad que tiene el territorio, ¿qué puntos son más vulnerables? En particular, el hacinamiento y las bajas condiciones de disponibilidad de agua potable, de espacios públicos”.
Aproximadamente hay 47 mil alumnos repartidos en 182 unidades escolares en la comuna, lo que representa el 6% de la Ciudad y una gran parte no tiene acceso a conectividad. “Ahí estamos en un gran problema”, reflexionó Turano. Respecto a la virtualidad en general, consideró que “los beneficios se van a ver a posteriori. Hay que ver de qué manera el teletrabajo y las cuestiones a distancia vinieron para quedarse. Desde ya el punto en contra es el tema de socializar” y planteó que lo que pasó en este tiempo es que hubo “una aceleración en este tipo de procesos que se tuvo que dar de manera espontánea”.
Conversatorio: Educación y su prospectiva de futuro en la Comuna N° 7
Como parte de la investigación, el equipo del LABIM va a realizar un conversatorio online sobre la temática de la educación actual y a futuro en la comuna el próximo 10 de junio a las 19hs. Es una actividad abierta a la comunidad en donde se sortearán tres plantas nativas entre los concurrentes. Para participar podés inscribirte aquí.
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