Siguen los cortes de luz y faltan soluciones

Mientras las empresas distribuidoras y el Gobierno Nacional se achacan responsabilidades sobre los constantes y reiterados cortes de luz que afectan a la Comuna 7, los vecinos vuelven a ser rehenes de los cimbronazos de un sistema eléctrico vetusto y colapsado que incluyen la no tan novedosa aparición de los cortes masivos en época invernal.

Las responsabilidades son muchas. De un lado están EDESUR y EDENOR, a cargo de la concesión y que en casi 25 años no estuvieron nunca a la altura del desafío que significaba proveer energía en barrios de constante crecimiento.

Estas empresas se nutren de subsidios estatales para mantener el servicio al limite mientras fugan capitales al exterior, hecho que quedó en evidencia con el escándalo de las cuentas truchas en la filial del HSBC en Suiza, donde consta que en solo 5 meses sacaron del país más de 90 millones de dólares.

Enfrente están el Ministerio de Planificación y el ENRE, cómplices por acción o por omisión, que permiten que el saqueo continúe y que se institucionalicen los cortes programados, un servicio tremendamente deficiente y la política del «parche» planteada por las distribuidoras. Como ya es costumbre, solo reaccionan ante la movilización y los cortes de calle organizados por los vecinos, imponiendo sanciones irrisorias y desligando responsabilidades ante las cámaras de televisión.

Mediante un comunicado, la Asamblea de Vecinos por la Luz asumió el compromiso de seguir reclamando soluciones concretas y definitivas que garanticen la provisión del servicio a largo plazo y den por solucionado un conflicto que lleva más de 10 años. Entre las medidas, mencionan la revisión de los contratos de concesión a EDESUR y EDENOR y la creación de nuevos mecanismos y protocolos de supervisión a manos de instituciones de la sociedad civil que representen a los usuarios y consumidores.